Vivimos en mundo profundamente caótico... pero hay esperanza.
La sexualidad es una parte fundamental de lo que significa ser humano... parte de lo hermoso diseñado por Dios cuando creó todas las cosas.
Sin embargo, hoy en día, el sexo en nuestro mundo no se parece en nada a lo que Dios diseñó.
El caos en el área sexual nos rodea y, de una u otra manera, nos afecta a todos.
Esta desolación sexual revela nuestra profunda necesidad de redención; algo que es imposible conseguir mediante remedios rápidos, una mera modificación de la conducta o una serie de reglas.
Sincero y directo pero benigno y compasivo a la vez, este libro nos señala el único lugar donde podemos encontrar ayuda para el caos sexual: la gracia transformadora de Jesucristo. Solo esta gracia ofrece esperanza para una vida de libertad, pureza y gozo, tal como Dios quiso.