Cada uno de nosotros siente cierta inquietud, una nostalgia inconsolable. Algunos tratan de satisfacerla con vacaciones pintorescas, logros en el campo de la creatividad, grandes producciones cinematográficas, incursiones en el ámbito sexual, deportes que ofrecen grandes espectáculos, drogas alucinogénas, rigores ascetas, excelencia gerencial y más. Pero la nostalgia permanece. ¿Por qué?
John Piper nos hace volver el corazón hacia el único objeto verdadero del deseo humano: Dios. Nos muestra cómo, al cumplir con el deber de deleitarnos en Él, puede cambiar nuestra actitud hacia el matrimonio, los bienes materiales y nuestra misión y propósito en la tierra. ¡Acompáñelo en una travesía que va de un deseo desesperado al deleite infinito!